Eduardo Garay Vega
(1970, Querétaro, Qro.). Mentiroso profesional, he publicado los libros Crónicas-crónicas y Aventis, ambos en Puebletaro. Lo que digo lo digo en serio aunque
la gente sólo se ríe de mí. Estudié una Maestría en Literatura y
voluntariamente acepto mi incapacidad para elaborar la tesis de grado. Puedo
presumir haber sido editor, corrector, mal voleibolista, coordinador de
talleres y presidir el Centro Queretano de Autores Literarios A.C.
Debo
decir que me encanta hablar de mí mismo, me fascina la música aunque no toco ni
el huiro, tengo una lista de canciones favoritas que incluye, en primerísimo
lugar, varias de Led Zeppelin, Pink Floyd, Los Ángeles Azules, Botellita de
Jerez, la Sonora Santanera, los Rollings Stone, Seru Giran, el Acapulco
Tropical, Joaquín Sabina, Jaime López, Silvio Rodríguez, Soda Stereo, y un
infinito etc... En contrapartida no soporto a Gustavo Ceratti, Maná, Los
Terrícolas, Los Folkloristas, los Bee Gees, Diego Verdaguer, Camilo Sesto,
Gabino Palomares, Arjona, y otro infinito etc.
Fui
editor de deportes a principios del siglo XXI. Jugué futbol americano con los
Zorros del ITQ y todos los domingos salgo a tirar polilla en las canchas de
volibol de una unidad deportiva ubicada en la calle de Literatura, en la
capital queretana.
En
literatura, me encanta la latinoamericana, casi toda la literatura llamada “de
la onda”, muchos de los autores del “boom”, leer cuentos de todo tipo y ver
pornografía en internet. No me mencionen a Ángeles Mastretta, Roberto Bolaño o
a la literatura queretana porque seguro hay pleito.
Resumiendo:
el futbol es un buen pretexto para tomar cheves y estar con los amigos, soy
malísimo y pese a tener una barriga enorme, me divierto como enano jugando voly,
los toros ni me gustan ni los entiendo (aunque edité varias páginas sobre El
Juli, y David Silveti, entre otros) y, como ya dije, tengo estudios de
posgrado, pero decidí trabajar de intendente en una escuela primaria que cuenta
con alumnos con Necesidades Educativas Especiales, y lo hago nomás por
joder. Las dos frases básicas de mi vida
son “¿Por qué?” Y “No estoy de acuerdo”.
Por
último, he finalizado un tercer libro: Crónicas
de un escritor de buró, que anda
en busca de un editor desesperado por publicar lo que sea...
Bienvenido
al club
Tras oír a Sabina
Desperté y
descubrí que ella se había llevado mi cartera, mi corazón y mis suspiros. A
cambio, me dejó una tarjeta con la dirección de los poetas románticos que
cantan lugares comunes a sus musas.
Los
sobrinos
Sergio, José
Abraham, Amaranta, Juan Mario y Díon son mis sobrinos. Tienen 14, 10, 9, 6 y 6
años. Acaba de nacer Vlady, tiene 6 meses. Y al hacerlos personajes de esta
minificción siempre tendrán la misma edad. Es la única manera de tenerlos
quietos.
El
cine y la vida (II)
En el séptimo día
Dios inventó el cine y actualmente permanece en su sillón favorito, observando.
Fabulilla
Con perdón de Monterroso
Este era un gato
que se sentía León. Tal era su ansia por ser el Rey de la Selva que, sin darse
cuenta, se convirtió en un perrito faldero de las hienas que merodeaban a su
alrededor.
Sopa
de letras
En memoria de Arrigo Coen, Pedro Brull y
Francisco Liguori
El sábado estuve a
punto de escribir un cuento, pero la comida se enfriaba.
1 comentario:
Maravillosos...
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