Mariano F. Wlathe nació en la Ciudad de México el 29 de enero de 1986. Estudió Ciencias de la Comunicación en la UNAM. eN 2010 obtuvo el segundo lugar en el 4o Concurso de Cuentos sobre Alebrijes del Fideicomiso Museo de Arte Popular. Sus cuentos se han publicado en las antologías Bosques, Penumbria Año 1, ¡Está vivo!, Breve antología de microrrelatos anti-navideños, y en las revistas: Penumbria, RegistroMx, Radiador Magazine, Revista ARTEntado, Alternanzas, Infame, Semen, Prosvet, Nocturnario y La libélula. En Octubre de 2013 publicó su primer libro de microficciones: Calavera.
Desde que la vi con otro, para mí ella se volvió un fantasma; aunque el muerto hubiera sido yo.
Desde que la vi con otro, para mí ella se volvió un fantasma; aunque el muerto hubiera sido yo.
000
—Vamos, hijita. Hoy es el día que nos toca
estar juntos —dijo el papá.
La niña miró el
calendario para recordar cuál de los dos era el muerto.
000
Su mamá revisó el ropero y debajo de la cama
en busca de fantasmas. El niño miró a través de ella y sonrió.
000
El abuelo cenó tranquilo con la familia; sin
embargo, se alteró al ver su foto en el altar.
000
Aunque estaban vivos, enterramos a sus hijos
con él para que no tuviera por qué regresar.
000
Hace un año sembré el cráneo de mi madre en
el jardín; hoy, docenas de hermanos cuelgan del árbol que creció.
000
Fui a que me leyeran los huesos, pero no
soporté el dolor cuando cambiaron de página.
000
Descubrí que siempre estuvo tras mis huesos
cuando exhumó mi cadáver.
000
Entre los muertos, los gusanos siguen siendo
la mejor forma de perder peso.
000
En el porno entre esqueletos uno nunca sabe
si queda poco o mucho a la imaginación.
Los profanadores sólo encontraron palabras en
la vieja tumba del escritor.
000
La culpa es un gusano que carcome los huesos
de los vivos.
000
Cada año es más difícil proveer la comida
para la ofrenda de mi tío caníbal.
000
—Voy a sacar a pasear a los niños.
—Está bien, pero no
olvides volver a enterrarlos.
000
Su biblioteca estaba llena de cráneos porque
prefería pasar más tiempo con los autores que con sus libros.
000
Aunque se disparó en la cabeza, siempre la
imagino saltando de una ventana. Una ventana que se abrió cuando todas las
puertas se cerraron.
000
Recibir un beso de ella cada noche lo seguía
reconfortando, no importaba que hubiese muerto hace años.
000
—No quiero morir —dijo mientras se desangraba
entre mis brazos.
Me conmovió tanto
que, por un momento, olvidé que yo era la muerte.
000
Al verse convertido en esqueleto, quiso
pellizcarse para saber si soñaba, pero no encontró dónde.
000
Cada año amanece en el bote de basura la
comida del altar a la niña que murió de anorexia.
000
En un país de muertos a los vivos se les pone
ofrenda.
000
Atormentado por su fantasma, finalmente,
decidí enterrarla.
Contacto: mfw.contact@gmail.com
Página Web: Calavera.
Contacto: mfw.contact@gmail.com
3 comentarios:
Me gusta.
Totalmente geniales.
Extraordinarios.
Publicar un comentario